martes, 24 de febrero de 2009

ÉL ÚLTIMO HÉROE DETRÁS DE LA LUNA




Mucho se habla día a día de este hombre y absolutamente nada se ha dicho aún. Estamos hablando de quién en un momento fuera un joven inglés, nacido en una época en muchos aspectos diferente a la nuestra, y estoy obligada de hacer notar que cuando él era un niño, gracias a Dios la televisión no existía, como tampoco existió para distraer a Mozart, a Federico García Lorca, a Newton o a Einstein. Esa debe ser por lo menos una de las razones por las cuales la humanidad tuvo hombres de tanto prodigio y virtuisísmo. Y vaya que Roger Keith no estaba desprovisto de ese prodigio y ese virtusísmo. El problema sigue siendo que la sociedad parece carecer de esa cualidad que se denomina "entender al artista" "respetar al artista" "confraternizar con el artista" "apoyar al artista" "ahondar en el espíritu del artista". Deberíamos hacer hincapie en el hecho de que Roger ya era desde pequeño, un ser brillante. Un pequeño que ya se interesaba por pintar, por aprender a tocar ciertos instrumentos, nacido naturalmente en un país como Inglaterra, dónde se les enseña a los niños-creo que esto no ha cambiado-a interesarse por el arte y no por los chimentos de la farándula-haciendo la salvedad de que si, es cierto que la prensa británica siempre se caracterizo por ser "amarilla"-pero bien, no por ello se deja de fomentar un creciente interés del hombre frente a una obra de arte, hecho que se va inculcando durante el tiempo escolar. Y decía que Roger "Syd" era un joven brillante; de hecho hasta llegó a construir en una ocasión un determinado intrumento o cierto aparato sonoro-no se exactamente cual-aparte de que diseño muchas de las carátulas para los álbums de Pink Floyd.
Estuvo en otras bandas, antes de los Floyd, y compuso su primera canción a los 16 años; "EL Elefante efervescente". Pero Roger era además poseedor de un don que les acaece a muy pocas personas en este mundo: era sinestésico. Es más; la sinestesia ocurre por los general, a personas del sexo femenino, y muy pocas del sexo masculino. ¿Y qué significa ser "sinestésico"?. Se trata de una persona que por razones genéticas, tiene en el cerebro las áreas de la percepción muy cercanas unas de las otras; por ello la persona "oye los colores" y "ve los sonidos". Esto no es un absurdo; muchos científicos y profesores han dedicado horas de estudio a este tema. De hecho en sus textos hacen referencia a músicos como Olivier Messiain, Alexander Scriabin, entre otros. Cuentan como por ejemplo, Olivier Messiain componía sus obras en base a una escala cromática. Si bien muchas de éstas almas privilegiadas han sido artistas, otros no lo han sido, pero se cuenta de casos como por ejemplo el de una señora que cuando sonaba el timbre de su casa, dibujaba ondas expansivas; el de un hombre que cuando oía hablar coreano, veía relámpagos. Y hay infinidad de casos más. Para que un niño sea sinestésico, es necesario que la mamá lo sea también. Los científicos no hablan en sus textos de Roger Keith, por el simple hecho de que quizás no esté difundida ésta cualidad suya como debería difundirse, y por ende, se pierden de aportar una alhaja más a su cajita científica. Se puede llegar a lograr algo de sinestesia si se consumen ciertos alucinógenos, pero no es lo mismo; es algo momentáneo y no algo que llevás contigo para toda tu vida y que te puede abrir infinidad de puertas, para cultivar tu propio espíritu. El hecho de que Roger administrara alucinógenos, no lo hace ni un estropajo, ni un maldito yonqui-para mi los yonquis son personas hermosas, pero lo de "maldito" lo agrega la sociedad, siempre proclive a condenar al otro, tapando su propio espejo con una sábana- ni un demente. Simplemente era un ser con un mundo interior maravilloso, que naturalmente, utilizó alucinógenos para aumentar su enorme potencial creativo, y poder entregar un material que la humanidad disfrutará por los siglos de los siglos "amén", aunque luego él mismo se haya en cierta forma resentido y se haya negado por el resto de su vida a componer un solo tema más. Y aquí hay un hecho interesante a destacar: no "enloqueció" por causa de los alucinógenos y por eso debió abandonar: simplemente se cansó; se stressó; colapsó como podría pasarle a cualquiera; porque el mundo del rock and roll tampoco es tarea fácil; no se trata simplemente de subir a un escenario y castigar la guitarra; hay presiones; hay contratos; hay exigencias para que un material salga en determinado tiempo, porque así la compañía lo exige. Y ni que hablar del esfuerzo físico que suponen las actuaciones en vivo. Los señores que están detrás del equipo de grabación no son por cierto siempre los ingenieros de sonido; están los directivos, los productores, los representantes, los gerentes y toda una galería de villanos al mejor estilo Ciudad Gótica que pretenden hacer y deshacer tu vida como ellos quieren y manejarla a sus anchas como una pelotita de ping-pong. Ellos pretenden diseñar tu imagen; hablan por tí y pretenden pensar por tí; tu representas la realidad de una promesa económica muy tentadora. Tú estás al servicio de ellos. De hecho, quienes admiren por ejemplo al gran Jim Morrison sabrán cuánto de real hay en mis palabras: gracias a esos Gremlins de la industria discográfica es que hoy lo que el mundo ve de Jim Morrison no es más que un alcohólico-drogadicto-mujeriego-contestatario; yo por el contrario, queriéndolo como lo quiero, y habiéndolo estudiado como lo hice, señalaría ésto: iconoclasta-genio-alcoholico-vanguardista-contestatario porque ésta es, la realidad de un Jim Morrison que muy pocos conocen, como tampoco conocen a Roger Keith; no diría yo iconoclasta, pero sí, y lo afirmo sin ningún temor, "vanguardista". ¿ Y porqué el "vanguardista" lo abandonó todo?. Por lo que ya he expuesto antes; y además, para dedicarse a su verdadera pasión; la pintura. Roger simplemente se fatigó demasiado; quizás su condición física( era muy delgadito y de pequeña complexión) no le permitió llevar sobre sus espaldas el peso del planeta del rock and roll. He pasado largo rato aquí en internet yendo de un sitio para otro buscando sus pinturas; hasta llegar a leer el absurdo de que quemó todas sus pinturas antes de morir; mentira!, mentira!, y mil veces mentira!. Lo que simplemente hacía era tomar una fotografía luego de concluído el trabajo y destruír la lona. Pero como las mentiras no hacen dieta ni van al gimnasio, engordan y al correr un poco se cansan. Tuve la suerte de encontrar tan solo dos blogs(de los muchos que hay) dónde uno puede copiar esas pinturas y llevarlas hasta "mis imágenes", no sea cosa que por alguna maldita razón la página caduque y nos quedemos tan sólo con esas aberrantes aglutinaciones web que todo lo que dicen es que Roger estaba loco y que el LSD acabó con su vida; y esto sin contar las muchas calumnias y corrillos que por ahí se encuentran.
En ésta sociedad hay quienes tienen por alguna extraña razón el privilegio de hacer lo que se les canta en gana y aún ser aplaudidos y festejados. Hoy en día tenemos un amasijo de estrellitas de cuarta categoría que apenas saben si saben donde están paradas, pero que sin embargo tienen la osadía de hacerse tildar de "transgresoras". ¿Y qué es ser "transgresor"?. Quizás no tenga yo el mismo concepto de "transgresión" que tiene el resto de la sociedad. ¿Qué es para usted, señor lector "transgredir"? ¿Teñirse de platinado el cabello y hacer una serie de huecas contorsiones eróticas , luego consumir un poco o mucho de cocaína, y luego tener un romance con que no sé que fulano, y luego comunicar a la prensa que se va a encerrar a leer la Torá de los judíos y la Kabalah de por vida amenazando no aparecer nunca más en escena, y al otro día aparecer en un evento de Versace, y luego protagonizar una escandalosa escena de mutilado sexo en una avenida mostrando una teta que aparecerá en las más prestigiosas revistas de chimentos del mundo y que además esa teta mostrada cuesta 5 millones de dólares?. Si eso es transgredir...eso para mí es llegar al colmo de la imbecilidad, de la ignominia, de la payasada en toda la amplitud de la palabra. Pero lo malo es que a éstas personas, con toda su idiotez encima, hay quienes tienen el descaro de afirmar que "revolucionan" "que son libres" (?????????) y que los que no los entendemos no pasamos de ser un montón de viejos chatarreros. Y bien si a éstos personajes se les aprueba todo, se les festeja cuánta estupidez hacen, entonces, ¿ Qué hay de malo en que Roger entrara en una tienda y se probara 3 pantalones y quedándoles todos a la medida sin embargo no adquiriera ninguno?. Todos alguna vez en nuestras vidas, hemos hecho algo así. Es natural, es normal. Pero cuando lo hace Roger no lo es; es sinónimo de ezquisofrenia, de paranoia y yo que sé cuántas idioteces más.
La sociedad tiene ese pequeño gran problema: no aprendió nunca ni aprenderá a discernir luz natural de luz artificial.
Hace poco rato leía un ensayo de un escritor admirado por Jim Morrison llamado Antonin Artaud y a quién yo no conocía. Ese trabajo se llama, "Van Gogh, el suicidado por la sociedad", y lo recomiendo. Allí Artaud expone el caso de escisión entre Van Gogh y la sociedad, de cómo ésta última siempre se mostró hostil con el genio(pobres idiotas) y hasta de como se burlaban porque Vincent llevaba doce bujías en su sombrero para pintar de noche. ¿Es que había otra forma de hacerlo?, pregunta el autor de este singular trabajo. Refiere también la verdad sobre el Doctor Gachet y le atribuye el suicidio de Vincent, ya que al parecer el "psiquiatra" Gachet le tenía una gran envidia y de ésta envidia extrajo el veneno necesario para ser inyectado en la mente de Vincent; el peor quizás de todos los venenos; "apaciguate", "no pienses".
Quizás ni a Vincent, ni a Roger, ni a Jim Morrison ya les importe un bledo de lo que la gente pueda decir de ellos; desde su condición de espíritus, de masa energética que flota en alguna parte de este universo. Pero los que aún no nos convertimos en esa masa vaporosa, tenemos la obligación de salir en defensa de aquellos que dieron tanta belleza, tan virtusísmo y que por el contrario no reciben más que una sarta de insultos y toda clase de argumentos infames, y cuando no, diatribas. Sí: diatribas. Los que estamos vivos aquí, nos comunicamos con los que están presentes aquí, más allá que el genio desde su puesto celestial considere una enorme perdida de tiempo hablar de alguien que ya dejó gracias a Dios éste mundo, hace ya mucho tiempo. Nada más higiénico que la verdad; la verdad nutre, la verdad hace crecer, la verdad engrandece el alma.
Cuando la gente aprenda a leer y mirar con entusiasmo y a pleno corazón una pintura de Vincent, de Roger, o uno de los libros que escribió Jim y que muchos aún tildándose a si mismos de fanáticos no han siquiera jamás leído una hoja, entonces saldrá el genio de adentro de la lámpara, en toda su plenitud, en toda su virilidad, en todo su magnetismo. Muy pocos saben que Roger leía mucho; más que nada, Historia del Arte; que cultivaba el jardín; que charlaba con entusiamo con las cajeras del supermercado; que encantaba a los niños; y que no solo no quería hablar de PinK Floyd, sino que además no comprendía porque la gente insistía tanto con esa etapa de su vida; para él, era algo que había quedado muy atrás en el tiempo. No comprendía cuando las muchedumbres querían abordarle; de alejar a estas muchedumbres se encargaba su hermana, Rosemary. Quizás algún día, si tenemos esa suerte, aparecerá un trabajo suyo sobre historia del arte, Dios quiera sea así, sería lo más justo sin lugar a dudas. Dios quisiera que ésto se hiciera posible.
El eterno problema de la barba y el pelo largo. Parece inverosímil pero en pleno año 2009 y a casi 10 años de haber comenzado un siglo, todavía hay personas que creen encontrar algúna característica de distorción mental en quienes llevan el cabello largo y usan barba. Así la barba y el pelo largo de Jim Morrison dieron dolor de cabeza a muchos; hasta llegar parece a impedirles el sueño; y hasta hubo quienes consideraron -porque se les vino en gana- que aquella barba y cabello largo eran sinónimo de "la vida disoluta me ganó la partida". Este es el caso del Sr Oliver Stone, quién un día tendido en el borde la piscina de su mansión se le ocurrió que podía hacer un film sobre Jim Morrison; pero no el verdadero James Douglas; tenía que ser un Jim Morrison amasado, horneado y decorado según su capricho; y naturalmente, ya sabemos que la sociedad no se caracteriza ni por tener limpios pensamientos ni por desechar el morbo; y allí estaba; el Jim Morrison que dejó crecer su barba y cabello porque ya estaba "en la últimas". Eso sí, nunca jamás llegar a permitir que alguien considere que tal vez ésta decisión simplemente sea el reflejo de un hombre con ideas de iconoclasta, o que simplemente se cansó de ser el lindo de la película.
Y parece ser que el pobre Roger tampoco se salvó; si en algún momento de su vida decidió que se dejaría crecer el cabello y la barba, vaya uno a saber porqué, quizás simplemente porque se le antojó en los testículos-hay quienes en este mundo toman una decisión y no hacen daño a nadie, y hay quienes el peso de sus decisiones recae sobre nuestras espaldas; pero a esos nadie les da cachiporra; todo el mundo con la cabeza gacha y a obedecer-, pero el mote de pobre drogadicto loco y enfermo, oh! mirá las consecuencias del LS.D! ya tiene barba y pelo largo! está completamente muerto!(¿se puede estar muerto a medias?), decía que ese mote, no le fue ajeno.
¿Y que hubiera ocurrido si Vincent Van Gogh se hubiera autoretratado con el cabelllo largo y la barba crecida?. Seguro que el Doctor Gachet no hubiera tardado en diagnosticar que "estamos frente a un caso gravísimo de ezquisofrenia incurable e irreversible", claro que quizás dificilmente se lo hubiera dicho en la cara del propio Vincent. Sucias artimañas de los doctorados en psiquiatría; como lo explica Antonin Artaud.
Volviendo a Roger, y tal como su propia hermana lo dice, él era un lindo ser humano; considerado como su mejor amigo. Su vida no era una tragedia tal como leí en un fecal blog italiano; su vida era pacífica; se levantaba tarde, luego iba a comprar materiales para realizar sus pinturas. Y lo que es más interesante; los psiquiatras que le atendieron no creyeron necesario administrarle ningún tipo de medicación. Así es. Amaba las flores, le apasionaba la jardinería. Vivía sencillamente, sin grandes lujos. El pestillo de la puerta de su dormitorio tiene la forma de un hipopotamito. Un detalle curioso; ¿porqué en su vida el seis es un número omniprescente?. Nace un 6 de enero del año 1946; su breve carrera musical se da en los 6O; muere en el año 2006; el número de puerta de su casa era el: 6.
Mientras tanto, ésta charla lo único que pretende es jalar la cisterna del water clock, a ver si así se limpia el excusado de tanto blog mal oliente; a ver si de ésta manera se consigue que la gente tenga una imagen lo más fidedigna posible de este genio,-de Roger- y no una imagen distorcionada, como la que ya tenemos.
Ya tenemos una imagen oscura y patética de Jim Morrison; imagen diseñada por ese chapucero burgués de poca monta de Oliver Stone. bien poco vale ese patético film que hizo; pocas veces se ha desvalorizado tanto a un hombre de luces tan largas como Jim Morrison.
Que no pase lo mismo con Roger; a ver si a Stone no se le ocurre defecar debajo de la mesa por segunda vez.
Los que estamos aún en la carne, debemos abrazar con cariño a los que están allá; todos nos merecemos eso, y mucho más.





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